el papa León XIII (1878-1903) otorgó una bula para crear el obispado de Madrid-Alcalá (al depender Madrid del obispado de Toledo nunca tuvo catedral) y convertir la iglesia de la Almudena en la futura catedral de Madrid.
El nombre de Almudena es de origen árabe y hace referencia al almudí o almacén de trigo existente en el antiguo enclave musulmán.
En 1623 se realiza el primer proyecto de construcción de una catedral para Madrid