Una ciudad como Madrid tiene mucho que ofrecer, tanto a los turistas como a sus propios habitantes. Por eso, encontrar una forma de desplazarse por ella de la forma más sostenible posible es necesario. Por suerte, Madrid ofrece diferentes alternativas al respecto. De hecho, el coche es la opción menos aconsejable.
El transporte público, una forma económica de moverse por la ciudad
No cabe duda de que una de las mejores formas de desplazarse por la ciudad es recurrir a su sistema de transporte público. Después de todo, allí dispondremos de una red de metro bastante amplia y completa que nos permitirá acceder a casi cualquier zona de la ciudad. En realidad, hablamos de una red de alrededor de 300 kilómetros de recorrido compuesta por hasta 12 líneas diferentes.
Si lo de viajar bajo tierra no nos convence, el autobús puede ser una excelente alternativa. Después de todo, la ciudad cuenta con una red de buses urbanos de lo más extensa. Gestionada por la Empresa Municipal de Transportes, sus más de 180 líneas disponen de vehículos modernos y equipados con wifi para los pasajeros.
Bicicletas y patinetes, una alternativa más saludable
Aunque la red de transporte público de la ciudad es excelente, cada vez son más los ciudadanos, especialmente dentro del sector más joven, que prefiere desplazarse por medios alternativos. Así, las bicicletas y los patinetes han ganado terreno a otra clase de vehículos, especialmente a lo largo de la última década.
La bicicleta siempre ha sido una opción popular, pero hoy en día está cada vez más presente en los desplazamientos urbanos. Su único “pero”, tal vez, sea que requieren de un espacio donde aparcarla: después de todo, contar con bicicletas para toda la familia va a ocupar mucho espacio en casa. No obstante, si recurrimos a la contratación de unos trasteros en Madrid como los de HOMEBOX, esto no tiene por qué ser un problema.
Además, hay que considerar que los ayuntamientos apuestan por facilitar su uso, ya sea mediante la instalación de carriles destinados a estos vehículos, o a través de diversos servicios de alquiler.
Lo mismo ocurrirá con los patinetes, una alternativa amigable con el medioambiente que ha ganado terreno durante los últimos tiempos, y que también podemos guardar en un trastero. Se trata de una opción ligera y que permite, además, que el dueño combine su uso con el del transporte público siempre que lo desee o lo necesite.
A día de hoy, tanto bicicletas como patinetes cuentan con alternativas eléctricas.
El taxi, la opción más cómoda
Siempre que haya una emergencia o se tenga prisa, el taxi puede convertirse en una opción a tener en cuenta. Después de todo, aunque se trata de un vehículo a motor, y, por lo tanto, no es tan sostenible como el transporte público o la bicicleta, sigue siendo una alternativa al coche privado. En Madrid, los taxis son distinguibles por ser blancos con una línea roja en diagonal, y ofrecen tarifas bastante razonables. Si vamos a hacer un trayecto corto, pues, nos pueden sacar de más de un apuro.
Madrid es una ciudad moderna y cosmopolita en la que es posible desplazarse de muchas formas. La gente cada vez está más concienciada con el medioambiente, y por eso las alternativas al coche ganan presencia día tras día. Así, la bicicleta, el patinete o el transporte público se han convertido en opciones de futuro.