Aranjuez

El municipio de Aranjuez se encuentra a 40 km al sur de la ciudad de Madrid, casi en el límite de la provincia de Toledo, en un privilegiado emplazamiento entre los ríos Jarama y Tajo. Es un enclave natural de profuso arbolado, con huertas muy feraces, donde los veranos son frescos y los inviernos más suaves que en Madrid.

Ya lo habitaron los romanos, también los musulmanes, y durante la época medieval se estableció en él la Orden Militar de Santiago. La Orden construyó un palacio que pasó a ser propiedad de los Reyes Católicos cuando éstos confiscaron las posesiones de las órdenes.

Para algunos el nombre de aranjuez deriva de las muchas arboledas que hubo en el lugar, suponiendo que la denominación actual procede del ibero arankej (nogueral o sitio poblado de nogales). Para otros, Aranjuez deriva de ara Jaois (ara de Júpiter), por el templo romano dedicado a Júpiter Pluvio que hubo en este lugar. Posiblemente, Aranjuez se corresponda con la Almuzúndica medieval, que después tomó el nombre de Aranz destruida por los almorávides en tiempos de doña Urraca. En el siglo XI, tras la reconquista del territorio, aparece citada como Aranzuel. El nombre actual data del siglo XV, cuando comenzó a ser frecuentada por los reyes.

Aranjuez y su entorno han estado ligados a la Corona desde los tiempos de los Reyes Católicos. Su amplia y espesa vegetación, la bonanza de su clima y la proximidad con Madrid hizo que el antiguo palacio de los Maestres de la Orden de Santiago fuera elegido por los monarcas como lugar de recreo y esparcimiento.

En un principio era tan sólo una pequeña aldea en medio de una fértil dehesa, donde los reyes podían disfrutar del descanso y de sus aficiones favoritas, principalmente el ejercicio de la caza.

Carlos V aunque visitó con frecuencia el lugar en partidas de caza apenas hizo obras en el palacio. Felipe II lo amplió y construyó un gran palacio real, cuyo proyecto encargó a Juan Bautista de Toledo y Juan de Herrera, sus arquitectos favoritos. Esta residencia estival de Felipe II, quedó notablemente destruido por un incendio en 1655.

Durante la Guerra de Sucesión el marqués de las Minas, en 1706, estableció en Aranjuez su gobierno.

Fueron sobre todo los monarcas Borbones quienes se ocuparon de dar rango monumental a este Real Sitio. Con Felipe V comenzaron los trabajos de ampliación. Posteriormente, durante los reinados de Fernando VI, Carlos III y Carlos IV se prosiguieron las obras.

Durante siglos el Real Sitio permanecería aislado. Felipe II primero y después Felipe III y Felipe V prohibieron que nadie viviera en Aranjuez.

Con Fernando VI llegaría el definitivo asentamiento de la población, las plazas, iglesias, conventos y viviendas particulares. En el siglo XVIII se instalaron varias manufacturas reales de artesanía de lujo, y también las casas nobiliarias. Todo ello alrededor del palacio, dando a la entonces incipiente localidad ese aspecto bello y homogéneo que hoy todavía conserva. Se construyó el jardín del Príncipe, se instalaron numerosas fuentes y el embarcadero. Con Carlos IV surgen todas las edificaciones interiores: la Casa del Labrador y la Casa de Marinos, y destacadas obras de la nobleza, como el palacio de Godoy o el palacio de los Duques de Medinaceli.

En 1790 sufrió un atentado el conde de Floridablanca, y el 17 de marzo de 1808, estando la familia real en Aranjuez, el pueblo asaltó la casa de Godoy en el transcurso del célebre motín de Aranjuez que puede considerarse el prólogo de la Guerra de la Independencia.

El suntuoso palacio y los bellos jardines no deben hacernos olvidar que todo Aranjuez cuenta con un conjunto urbano, homogéneo, barroco y acogedor.

El núcleo central del municipio de Aranjuez, incluidas sus dos calles principales, calle Infantas y calle del Príncipe, da señas concretas de la convivencia actual del pasado y el presente. Las edificaciones modernas rodean las calles adyacentes a la gran Plaza de San Antonio, en la que confluyen las fachadas de la Casa de los Oficios y de los Caballeros, –obra de Juan de Herrera de finales del siglo XVI– y la Casa de Infantes – trazada por Juan de Villanueva en 1799–. Ambas están unidas por la iglesia de San Antonio, que tiene una hermosa fachada tardobarroca. En el extremo contrario a la iglesia se encuentra la fuente de Venus o de Mariblanca que sustituyó a una estatua ecuestre de Fernando VI. Todo ello nos ofrece un monumental conjunto histórico-artístico.

En Aranjuez también es digna de visitar la Iglesia de los Alpajes, del siglo XVII, que fue la primera del sitio, aunque remodelada interiormente por Bonavía.

A la fama de Aranjuez también han contribuido sus espárragos y fresas, que cotizan en los mercados internacionales.

En el término municipal de Aranjuez existe una zona protegida por la Comunidad de Madrid, la Reserva natural de El Regajal-Mar de Ontígola.

La línea de ferrocarril entre Madrid y Aranjuez fue la segunda línea de ferrocarril española, inaugurada por la reina Isabel II el 8 de febrero de 1851. El nuevo medio de transporte daría a la localidad de Aranjuez un importante despegue en su actividad mercantil e industrial. Este tren fue bautizado como Tren de la Fresa.

Los grandes jardines del palacio de Aranjuez inspiraron a Joaquín Rodrigo el Concierto de Aranjuez y es en esta ciudad donde transcurre la acción del drama de Schiller Don Carlos. Un tren turístico une los diversos puntos de interés, que a pie se encuentran separados por varios kilómetros.

Fiestas, Ferias y Festivales de Aranjuez

-En mayo se celebra la Feria de Artesanía Alfaranjuez, así como el Festival de Música Tradicional Aranjuez Folk. También tiene lugar en este mes la Feria del Coche Usado y Seminuevo.

-15 de mayo, día de San Isidro Labrador, romería en la cercana pedanía del Real Cortijo de San Isidro.

-30 de mayo, día de San Fernando, patrón de Aranjuez.

-Entre mayo y junio se celebra el Festival de Música Antigua de Aranjuez.

-En junio tiene lugar la Feria del Libro de Aranjuez, en contrapartida con la Feria del Libro Usado y de Ocasión, que se celebra en septiembre.

-Primera semana de septiembre, Fiestas del Motín de Aranjuez, declaradas de interés turístico nacional.

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