Iglesia de San Cristóbal de Alalpardo
La Iglesia de San Cristobal, situada en Alalpardo, se sitúa en el mismo lugar en que estuvo según todos los indicios arqueológicos una construcción romana de cierta importancia (muy probablemente una basílica). De la construcción original, desgraciadamente, sólo ha llegado hasta nuestros días la torre, ya que el resto del edificio sucumbió a un terrible incendio declarado el 26 de Julio de 1879. Siendo el edificio actual de una sola nave, con planta de cruz latina, cabecera cuadrada y contrafuertes al exterior, fechado a finales del S. XIX y obra de Vargas Repulles.
La torre, de planta rectangular, responde al esquema de torre-espadaña, construida a base de cajones de verdugadas y esquínales de ladrillo, muy poco habitual en el gótico-mudéjar madrileño del S. XIV, corriente arquitectónica en que cabe encuadrarla. Se encuentra dividida en tres cuerpos: El primero es macizo y en él se abre la puerta principal del templo, situada bajo un arco ojival o apuntado que da acceso a una entrada o vestíbulo que coincide con el espacio ocupado por la torre, tras el cual y bajo un arco de medio punto se accede al templo. El segundo cuerpo, es aquel por cuyo interior discurre la escalera que da acceso al campanario, que se desarrolla en ocho tramos bajo bóvedas de cañón superpuestas (la ultima de las cuales ha desaparecido en la actualidad), y en torno a un figurado eje central. El tercer y último cuerpo es en el que se encuentra el campanario. Cuenta con cubierta de madera y ventanas de medio punto para situar las campanas: dos al frente, dos a la espalda y una en cada lateral.