Edificio Mac-Crohon
Este edificio, que se levantó en el solar de lo que fue un antiguo convento, fue construido a finales del siglo XIX —las obras finalizaron en 1882— por la familia Mac-Crohon para destinarlo a funciones de residencia habitual durante sus estancias en Morata. Tras la desaparición del palacio de los marqueses de Leganés y Altamira, esta construcción de ladrillo y estilo moderno constituye el mejor ejemplo de la arquitectura civil en Morata. Junto a los jardines anexos al mismo —desaparecidos tras sucesivas obras en el entorno que acabaron con el arbolado, la verja y las escaleras que salvaban el desnivel existente con la avenida de la Constitución— se construyó también el edificio de las Caballerizas que también se conserva todavía y que ha sido adquirido recientemente por el Ayuntamiento. Tras la guerra civil, en la que se utilizó el edificio como hospital, la familia propietaria cedió el edificio para su uso como escuelas públicas, función que mantuvo durante varias décadas. Posteriormente, tras unos años de abandono, Caja Madrid restauró el edificio, respetando todas las fachadas y estructura exterior, y adaptando su arquitectura interior para su utilización como Casa de Cultura (con biblioteca, salón de actos y sala de exposiciones) y Centro de la Tercera Edad.
Fuente: Ayuntamiento Morata de Tajuña