Madrid se apunta un tanto por ser la única ciudad del mundo que tiene un monumento al diablo. Impávido en su emplazamiento del Parque del Retiro, este Monumento al Ángel Caído, obra de Ricardo Bellver de 1878, representa a Lucifer encarnado en un ángel alado que se precipita a los infiernos.
Lucifer se inclina hacia atrás en su viaje al infierno en el Monumento al Ángel Caído, que remata una fuente rodeada de gárgolas y monstruos de exagerada expresión.