Perales de Tajuña

El municipio de Perales de Tajuña está situado en el sureste de la región. Se halla enclavado en la zona de la cuenca del río Tajuña, junto a cuyas aguas se encuentra el principal núcleo de población. Está dentro de la zona de turismo de Madrid de la Comarca de las Vegas.

Dista unos 38 km de la ciudad de Madrid. Es una localidad de calles estrechas y empinadas, que ofrecen, desde lo alto de la villa, hermosas panorámicas sobre el valle del Tajuña.

Gran parte del interés del municipio se centra en las cuevas horadadas por pobladores neolíticos en los altos farallones que se encuentran camino de Tielmes. Es un yacimiento estudiado desde el siglo XIX, que permite hablar de una primera población de la zona en el neolítico. Se trata de un barranco con sesenta cuevas, de dos a cuatro metros de altura, donde se han hallado cerámicas, hachas pulimentadas y otros utensilios. Plutarco narra la heroica resistencia de las tribus celtas ante el avance romano. Al parecer se refugiaron en estas abruptas cuevas y no resultó fácil la conquista. Al conjunto se suele llamar Risco de las Cuevas. Y desde 1931 goza de la categoría de Monumento de Interés Turístico.

Entre Perales de Tajuña y Morata de Tajuña el río Tajuña se divide en dos y surge una amplia porción de terreno que recibe el nombre de isla de Taray, nombre de diversas especies del género Tamarix que forman arbustos o árboles de hojas imbricadas y pequeñas flo¬res rosadas reunidas en espiga. La isla está unida a tierra firme por dos puentes.

La ruta que se puede hacer siguiendo el viejo trazado ferroviario hoy inutilizado es muy interesante para senderistas y cicloturistas.

Los monumentos más destacables y sitios de interés del municipio de Perales de Tajuña son:

— La iglesia de Nuestra Señora del Castillo, que se alza al final de una cuesta. Es de estilo barroco, y fue construida sobre los restos de un antiguo castillo derruido por el cardenal Cisneros. Destaca su portada, con una hornacina plateresca, y su espa¬daña.

— El viejo castillo, de los siglos XII y XIII, del que sólo quedan algunas partes de lienzo, murallas y torres, se encuentra en medio de los edificios locales.

— La plaza Mayor donde está el Ayuntamiento, construido durante el reinado de Carlos III. Sobresale en la fachada la torre del reloj con una veleta de hierro. Las columnas de hierro que soportan los bal¬cones fueron costeadas por los labradores de la villa en 1890.

— En la calle Mayor Alta hay una bella fuen¬te y otra cerca de la plaza Mayor con los tres monos de la fábula (ciego, para no ver el mal; sordo, para no oír el mal; y mudo, para no decir el mal).

— La fuente de Mariblanca popularmente llamada del juego de Pelota, en la calle Mayor Baja.

— La ermita de San Sebastián., de estilo barroco.

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