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El municipio de Colmenar Viejo se encuentra saliendo desde Madrid hacia la sierra de Guadarrama, en dirección norte, a 31 km de la capital. Se encuentra situado en la zona de turismo de Madrid de la Cuenca Alta del Manzanares.

Se eleva a más de 880 m de altitud sobre el nivel del mar, en una zona de transición entre la llanura y el piedemonte serrano. Tiene una superficie de 218,19 km2. Es sede del Consejo Regulador de la denominación de origen Carne de la Sierra de Guadarrama, lo que habla de la calidad de su ganado vacuno y de la ganadería, que sigue siendo una ocupación importante. En 1991, Tres Cantos se segregó de su término municipal para constituir el suyo propio. No obstante, sigue siendo el segundo municipio de la comunidad autónoma en cuanto a extensión, si exceptuamos el de la propia capital. Y es, de lejos, la villa de mayor entidad poblacional de la sierra madrileña.

De posible fundación visigoda se han encontrado monedas de la época de Recaredo y algunas vasijas . Los pastores segovianos, en permanente pugna con Madrid, se establecieron en la localidad, hasta que pasó a depender del Real de Manzanares en tiempos de Alfonso X el Sabio. Juan II lo cedió a la casa de los Mendoza. En 1504 Fernando el Católico le concedió el título de villa y quedó segregado de la jurisdicción de Manzanares, y pronto se convertiría en el centro económico y administrativo del señorío. Hacia 1570 contaba ya con 5.000 habitantes, lo que la convertía en una de las principales villas del territorio madrileño. En el siglo XVIII tuvo colegio de latín y humanidades, cuyo sencillo edificio aún se mantiene en la plaza del Maestro Almeida. En el siglo XIX se construyó la carretera de Fuencarral a Manzanares. En 1869 tenía correo diario y en 1888 le llegó el telégrafo. Después el ferrocarril. En 1891 se inauguró la plaza de toros en la que, el 30 de agosto de 1985, un astado de nombre Burlero pondría fin a la vida de José Cubero, el Yiyo, que sólo tenía 21 años.

Fue tierra de mucho ganado, que hoy se mantiene, y grandes bosques que ya han desaparecido. También sus canteras de granito han sido importantes y si la piedra de Colmenar de Oreja sirvió para levantar palacios y monumentos, la de Colmenar Viejo ha construido los miles de chalés de los pueblos serranos.

Se explica su nombre en las Relaciones topográficas que mandó redactar Felipe II, que dicen que en estas tierras vivía un viejo que tenía un colmenar y acogía en su casa a cuantos viajeros llegaban. De la asimilación de viejo y colmenar surgió el nombre del pueblo.

Merece la pena acercarse al Centro Comercial Mirador. En el pequeño espacio triangular anexo se ha instalado un singular bosque de grandes piedras, un magnífico exponente de las características geológicas de la sierra de Madrid.

El oriente de su territorio está incluido en el Parque regional de la cuenca alta del Manzanares. Partiendo de Colmenar Viejo existen muchas rutas para los senderistas desde Colmenar Viejo, como la que lleva a conocer los molinos, puentes y batanes diseminados por el término municipal.

Los monumentos arquitectónicos de la localidad son:

La iglesia parroquial gótica de la Asunción de Nuestra Señora, gótica, aunque algunos de sus elementos pertenecen al renacimiento y al estilo flamígero. Fue construida entre finales del siglo XV y principios del XVI. Su retablo mayor está compuesto por tablas de entre otros el pintor Alonso Sánchez Coello. Su torre y su portada septentrional son impresionantes. Ha sido declarada Bien de Interés Cultural por la Comunidad de Madrid.

La capilla de Santa Ana, tardo-gótica, de estilo asimismo flamígero y acabados mudéjares. Notable pasado arquitectónico el de Colmenar Viejo, y es que a esas dos construcciones se pueden añadir sin ningún demérito

La ermita de Nuestra Señora del Socorro, del siglo XVI.

La ermita de la Soledad, también del siglo XVI.

La ermita de la Virgen de los Remedios, barroca.

La capilla de San Francisco, del XVI.

La plaza de toros, en la que se celebran algunos de los mejores festejos taurinos de la comunidad desde que fuera inaugurada en 1891.

Los puentes medievales del Gramal y de la Marmota.

El puente sobre el arroyo del Espino, del siglo XVI.

Fiestas y Ferias de Colmenar Viejo.
Su antiquísima fiesta de la Vaquilla, que tiene lugar el 2 de febrero, está declarada de Interés Turístico Nacional. Las vaquillas son armazones de madera decorados con pañuelos y mantones. Los cuernos y un rabo de vaca proporcionan impronta animal al artilugio, que puede llegar a pesar 40 kilos. El mayoral, los vaquilleros y el taleguero forman el cortejo que baila sin cesar.

La muy pagana, y vinculada al culto de la Tierra, fiesta de la Maya se celebra cada 2 de mayo: se trata de elegir de entre un indeterminado número de niñas no mayores de 12 años, o mayas, cuál de ellas será la diosa de la primavera. Deben estar inmóviles durante unas tres horas, vestidas con ricos trajes, mantones de Manila, enaguas blancas y joyas, sobre altares también muy adornados con colchas y flores.

Las fiestas patronales son en honor de la Virgen de los Remedios y acontecen del 24 al 28 de agosto. El último domingo de agosto se traslada la imagen de la Virgen de los Remedios, patrona de la villa, desde su ermita a la iglesia del pueblo tras una parada de unas horas en la capilla de Santa Ana.

El Ayuntamiento organiza junto a la Comunidad de Madrid la Feria del Comercio e Industria del Norte de Madrid-Exposierra, cuyo objeto es el de de apoyar y promover a las empresas ubicadas en la zona norte de la región.

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Enlaces de interés

   Colmenar Viejo Oficial